Primero quiero decir que los amores eternos no son tan largos, y que la relación con una idea está directamente proporcionada a la oposición generada por la dupla creativa. En un lánguido momento de reflexión entendí que la magia que envuelve la primera idea radica precisamente en la oposición y poco prestigio del que goza. Hay que ver que esta idea cobra relevancia cuando la vemos donde habita el olvido, e invitándole un trago le prestamos la atención que mereció desde un principio, pero las falsas expectativas de mejores ideas nos hizo barajar de nuevo el mazo esperando una mejor mano.
El hijo del recurso y la pobreza es el amor, y el amor por la doble naturaleza de sus padres es el límite entre la indigencia y la saciedad; la primera idea tiene esa fuerza vivificante que está a punto de saciarnos, pero nunca nos deja satisfechos porque al ser hija de la intuición siempre está bastante cerca de estar catalogada de irreverente.
* ilustración: Osvany Tolosa / Cancun - México
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